La Boheme

Tip. 1. Claves para descifrar el primer encuentro entre Rodolfo y Mimi.
El de Rodolfo y Mimi es uno de los diálogos más celebrados de la historia de la opera. Presentándose por turnos y luego cantando en dueto, nuestros personajes llevan dos de las arias más bonitas de la obra. Llamamos la atención sobre lo siguiente: 1) Apréndete los temas que oirás. Serán recurrentes. 2) si te fijas, el aria de Rodolfo son realmente dos arias en una. 3) al tenor que interpreta Rodolfo, Puccini le ha puesto una alternativa: cantar un Do agudo o un La una escala más abajo. Eso depende del cantante. 4) en la salida de ambos del escenario, la última nota la cantan juntos, ya fuera de escena. Aunque Puccini no escribió la misma nota, los Tenores han ido tomando costumbre de llevar su voz a la altura de la soprano. Cuestión de soberbia? Temeridad? despliegue virtuoso?
Tip 2. El Cafe Momus, el Showcase de la vida parisina.
Bohemios, niños, vendedores, todos contribuyen al jolgorio en una las estampas más representativas del vida Parisina. Hay quienes señalan que esta escena anticipa la estética del cine neorrealista italiano del siglo XX, por su fidelidad al costumbrismo, sus efectos de "enfoque y desenfoque" en la conversación y en la actuación siempre espontanea de los niños.
Tip 3. El origen curioso del Vals de Mussetta.
Una de las piezas favoritas de esta ópera. La única aria propiamente dicha del acto II. Con bella música y la participación de varios de los presentes, Mussetta nos perfila su carácter frívolo y provocador. Es curioso saber que esta música fue originalmente una pieza para piano y luego Puccini, antes de incorporarla a la opera, la ofreció como dedicación a un buque de guerra estrenado en Génova!
TIP 4. Pintando con música
Como un coscorrón a nuestros oídos, típico recurso Pucciniano para que pongamos atención, dos acordes estruendosos inician el acto III. Lo que sigue es pintar con música. Oye como Puccini nos dibuja, a base de arpa y flauta, el frío invernal de madrugada en París.
Tip 5. La famosa anécdota detrás delaria de la chamarra.
Pareciera de muy mal gusto cantarle a una vieja pieza de ropa, dado el momento que se vive en el apartamento al comienzo del acto IV, Puccini confeso cándidamente que había incluido esta aria simplemente para darle al Bajo una oportunidad de tener una pieza propia en la obra.
No obstante esta Aria nos permite recordar una de las proezas más interesantes que se recuerde en el anecdotario operístico. En una representación de La Boheme en el Metropolitan en el año 1919, cuando el barítono se disponía a cantar esta aria, perdió la voz. Su compañero de reparto, Enrico Caruso, de espaldas al público decidió sacarlo del problema y cantó el Aria mientras el artista afectado simplemente movía los labios. Lo interesante no es solo que Caruso haya cantado un Aria que no le correspondía, sino que lo haya hecho en una tesitura vocal más grave, como corresponde al tipo de voz de su colega, y luego que nadie en el público lo haya notado.
Tip 6. La Muerte de Mimí por Puccini y por Leoncavallo.
Con un resumen de los temas ya escuchados, Mimí exhala en presencia de Rodolfo y en compañía de los suyos, como lo prescribe el Ars moriendi. Así concluye esta bonita ópera, que diera a Puccini un gran prestigio y una rivalidad de por vida con Ruggiero Leoncavallo, quien escribiera otra La Bóheme por las mismas fechas.
Lo curioso es que Puccini consiguió un éxito universal; Leoncavallo por el contrario nunca logró que se ópera se presentarás mas allá de unas cuantas funciones. En que radica la diferencia y en consecuencia la fortuna distinta de uno y otro compositor, partiendo de un argumento similar? Si comparas ambos trabajos verás que tanto en el libreto como musicalmente Puccini fue muy exitoso en crear una identificación de Mimi con el público, algo que Leoncavallo no fue capaz de conseguir. De allí que se llore la muerte de Mimí de manera muy diferente en una u otra obra.